Después de la tormenta simpre llega la calma, ¿lo dudabais? yo no, es algo que tiene que pasar, una vez las cosas están tan mal, ya no pueden ir a peor, y es lo que se avecinaba, un claro se habría en el cielo, y por él penetraron tímidamente unos rayos de sol. Sí, parece que las cosas van a mejor, al menos para mí, ya no tengo tantas preocupaciones y paso un poquito más de los que quieren hacerme daño. A demás, ¡estoy de vacaciones! ya iba siendo hora de descansar y no hacer nada en todo el día, si me lo merezco o no, no lo se, me gustaría pensar que sí, después de todo lo que he pasado...
Creo que ha sido una buena idea el haberme quedado en León a pasar estos días, echo de menos muchas cosas, pero no se puede tener todo, tenía que elegir, tranquilidad o tormenta... a simple vista es fácil, pero hay que sopesar todos los factores. Hay veces que una no sabe que hacer, que es lo más correcto en cada momento, pero hay que tomar una decisión, buena o mala, pero hay que tomarla, siempre pensando en que es lo mejor para nosotros. Y yo, la he tomado, por fin soy consciente de mis actos, y no me arrepiento de haberlo hecho, sé que no a todo el mundo le gusta, pero solo espero que se me respete. Y creo que ha sido una decisión aceptada, después de todo, ha traido la tan ansiada calma...
lunes, abril 10, 2006
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1 comentario:
Ya sabes que dice una de las leyes de Murphy, "cuando algo no puede ir a peor empeora", y estás leyes están inspiradas de la pura realidad, que en ocasiones es un poco trágica y con mucho humor negro. No obstante el que sube mucho cae de mas alto, no?. Bueno marinera a ver si recalas por mi isla, hay muchas sorpresas interesantes.
AH! El Bierzo que lugar tan bello para perderse.
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